Siguiendo la pasión de su padre, Nicolás juega junto a sus dos hermanos en «los jabatos de San Isidro» y junto a sus demás compañeros participan en el Torneo Nacional de Rugby. «Él es uno más del equipo, como no puede ser de otra manera se siente identificado e integrado en el equipo» señala el entrenador y delegado del club.
Son ya muchos los estudios que defienden el impacto positivo del deporte en las personas con necesidades especiales, gracias a Dios podemos encontrar miles de ejemplos buscando en la prensa o en la red.
El ejemplo de Nicolás nos recuerda que en el rugby en particular y en la vida en general lo importante no es ganar, debemos ser felices jugando y participando, Nicolás nos enseña que el triunfo no reside en la victoria.
Aunque esta noticia no es actual (2014) nos ha encantado rescatarla y traérosla, resume a la perfección todo en lo que creemos en Rugby Rugby Camp, porque no mentimos cuando decimos que el rugby acoge a todos por igual sin hacer distinciones, no importa tu condición física, raza, género o edad, el rugby es un deporte que invita a disfrutar del compañerismo, del trabajo en equipo y del respeto mutuo.
Este verano en nuestro campamento no será una excepción, seguiremos apoyando a todo lo que Nicolás representa, seguiremos amando este gran deporte.
Os recordamos que estamos en la recta final de Pre-inscripciones, no os quedéis sin venir. ¡Os esperamos!
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Rugby Rugby Camp, más que un campamento de verano.
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